La paradoja del Mercado, el precio del petróleo y el cisne negro.

Me encantaría ver la cara de todos aquellos especuladores que decidieron apostar por un petróleo a 200 dólares, cuando estaba a 140 hace unos meses. Pero es que, ni ese era su precio, ni tampoco los 25 que dicen que tiene de suelo. Esto nos demuestra tres cosas, en primer lugar que nadie sabe nada de los mercados financieros, en segundo lugar, no son un lugar, procedimiento o sistema adecuado para fijar los precios de ningún producto, y  en tercer lugar que todas las medidas que se han tomado en los últimos meses, el G-20, la intervención de los gobiernos y bancos centrales de todo el mundo, etc, etc, no han servido para nada, porque al final la irracionalidad sigue imperando en este zoco global. Porque, hay un tema importante que no se puede olvidar, a partir de 2011 todos los expertos en producción petrolífera insisten en que se empezará a notar la escasez, y los precios volverán a subir con fuerza. Por eso, aunque ahora en tiempos de crisis todos nos beneficiamos de precios de los combustibles tan bajos, no seria malo fijar ahora las reglas del juego.

Pero, no nos engañemos, nadie tiene bemoles para meterle mano al mercado, ni a sus operadores. Porque, una vez que han desaparecido los bancos de inversión, aquellos que en teoría eran los culpables de todo lo ocurrido, que se habían dedicado a especular y diseñar productos diabólicos campando por los mercados a sus anchas, quien esta jugando ahora?. Pues....los de siempre, no nos engañemos, el mundo sigue teniendo los mismos actores globales con la diferencia de que los intermediarios que pueden acceder a estos ámbitos se han reducido sensiblemente. Y, estos que han hecho, pues lo mas lógico, subir los precios e incrementar su margen en unos momentos en los que hay sacar rentabilidad de donde sea.

Así que, por mucho que se hagan grandes frases y análisis, la conclusión es clara, no nos engañemos, todo sigue igual.

Hay una película, "Wall Street", con Michael Douglas, muy buena, en la que se puede apreciar como realmente quien manda en los mercados es quien tiene la información antes que nadie, y sabe manejarla adecuadamente. Y eso sigue pasando exactamente igual que siempre.